miércoles, julio 19, 2006

Yo no soy de letras

- Oye, ¿cuánto son quince euros en pesetas?
- Joder, dos mil quinientas, tí­o, que no es tan difí­cil.
- Ya, bueno, es que yo soy de letras.

Este fragmento de conversación ficticia ilustra una situación que me saca de quicio. "Yo soy de letras". ¿Por qué no dice directamente "Es que no sé multiplicar"? Si siguiésemos esa regla de tres, yo, que soy de ciencias, deberí­a sembrar estas lí­neas de faltas de ortografí­a, pero ahí­ el argumento serí­a: "Tí­o, que eres universitario, a ver si escribes bien".

No es que pida que un estudiante de filologí­a resuelva una ecuación diferencial. Multiplicar, hacer la cuenta de la vieja, lo que sea, leñe. Es cultura general básica, como escribir sin faltas o saber la capital del maldito paí­s en el que vives (de las europeas mejor ni hablamos ¿no?).

Me estoy yendo por las ramas antes de empezar, pero es que me desquicio. No todos corremos los cien metros en 10 segundos, no todos descubrimos la teorí­a de la relatividad, no todos escribimos "El Quijote" y está bien así­. No critico que una persona no sea capaz de realizar una tarea relativamente simple. Lo que me enerva es que se enorgullezca de ello o se invente semejante excusa barata. Serás de letras, pero has dado tranquilamente diez años de matemáticas. Y lo mismo vale al revés (aunque no he presenciado tantos ejemplos): por mucho que seas de ciencias deberí­as saber quién fueron los Reyes Católicos, de qué idioma viene el castellano y hablarlo correctamente.

Todo esto viene porque el otro dí­a vi un despropósito escrito por alguien "de letras", perpetrada por una escritora reconocida que escribe una columna en un periódico gratuito. Esta señorita dedicaba una columna a despacharse contra el "culto al cuerpo" y lo relacionaba hábilmente con el consumismo y la publicidad con que bombardean a las mujeres en las revistas "femeninas". Hasta ahí­ nada que objetar. De hecho, quién me conozca sabe que soy muy crí­tico con eso, y habrá visto la mueca que me cruza la cara cuando sale una modelo tí­sica por la tele.

Pero claro, esta señorita tení­a que mantener su pose "alternativa" e "inteligente", y es ahí­ cuando sale el tertuliano que todos llevamos dentro, a opinar de lo que no se tiene ni puñetera idea. Y no creáis que se corta un pelo a la hora de condenar la recomendación de beber dos litros de agua diarios (una de sus perlas), ya que según ella eso era una especie de conspiración de las marcas que comercializan agua para darnos un gran sablazo. Según ella, como la comida que nos echamos al cuerpo es en su mayorí­a agua, no es necesario beber tanto. Lo que desconoce la individua es que la recomendación de los médicos es beber dos litros de agua AL MENOS, además de la que se ingiere al comer. Sobre todo con el calorcito que aprieta en verano estos últimos años. Pero claro, supongo que será de esas personas que opinan que a los médicos no se les puede hacer mucho caso (seis años de estudio no les dan vela en este entierro). Poní­a también el grito en el cielo por los casos de mujeres que van al médico con las sales minerales por los suelos, según ella por beber esos "excesivos" dos litrillos de agua al dí­a (servidor se está metiendo del orden de tres o cuatro, y parece que no me muero). Quizá habrí­a que comentarle que los casos de sales minerales tan bajos suelen ser producto del abuso de productos "bajos en sal" o "de mineralización débil", y que según la poca biologí­a que he estudiado yo, para que se note el impacto en las sales con una alimentación normal, habrí­a que beber alrededor de diez o más litros de agua al dí­a (creo recordar).

Aclarémonos: aborrezco ver a una mujer-esqueleto. Hay muchas veces en las que se les ve frágiles, te parte el alma ver la luz del dí­a a su través. Pero tampoco soy partidario de una mujer que sea más fácil saltarla que rodearla. A partir de aquí­ supongo que me ganaré unas collejas, pero lo que soy es partidario de la salud, tanto en hombres como en mujeres. Ni tan gordo que no pueda subir un tramo de escaleras ni tan escuálido que no pueda coger la bolsa de la compra. Al margen del aspecto, el "gordo feliz" es una putada inmensa. Puedes ser feliz pesando 40 o 240 kilos, aunque lo más seguro es que para tener salud tengas que estar en un peso más moderado.

Sin embargo últimamente sólo hay posturas extremistas al respecto: o tienes que ser un compendio de costillas para adaptarte a una moda idiota que hace tallas XL tamaño esqueleto de ciencias para acomplejar al 70% de la población; la otra postura aceptada es defender tu derecho a no verte las puntas de los pies hasta que te mueras (seguramente de infarto antes de los 50, pero feliz que te cagas con tu gordura). Cada uno se ha instalado en su trinchera y de ahí­ no los sacamos ni con lejí­a, mientras se disponen a bombardearnos con disparates sin importar los daños colaterales: crí­os de 15 años vomitando lo que ingieren o comiendo de forma absolutamente estúpida para lo que necesita un cuerpo en crecimiento y otros que se comen todo lo que los otros deberí­an, para ver si se comen de paso el rechazo, o desarrollando un odio irracional por los del otro extremo, alimentanto continuamente ambas trincheras.

Ese es un pequeño ejemplo de por qué me saca de quicio la ignorancia aplicada. No sabes y no te informas, pero te encargas de que tu opinión desinformada llegue a quién la tomará como buena por el hecho de estar en prensa escrita. Al menos los que entráis aquí­ lo hacéis por vuestra cuenta y riesgo, y supongo que no me concederéis más crédito que a cualquiera que os cuente lo que sea por la calle.

- Señorita X, que lo que ha dicho usted en su columna es una barrabasada, y más con la ola de calor que venimos sufriendo, que se nos muere la gente porque anda al sol y no bebe, no vaya a ser que en los de "Fuentrago" se lleven un euro de más.
- Bueno, es que soy de letras...

Y así­ seguimos señores. Y mejor no recuerdo cuando esta misma señorita despotricaba feliz en la tele sobre cómo rompió aguas en un cine, dando consejos de aguantar para dilatar, no vaya a ser que los médicos malos te hagan una incisión quirúrgica al parir para evitar el desgarro, bastante más agresivo. Pero qué le vamos a hacer, dar consejos es gratis, y en este paí­s "gratis" es la palabra mágica.

Yo, por mi parte, soy de ciencias, de toda la vida.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La excusa de la señorita X sería "es que yo soy periodista", concretando; porque te habrás fijado ya, que los periodistas investigan un 20% de lo que hablan...

Haruma dijo...

La excusa de la señorita X no vale. La individua es escritora (novelista) con lo que se ahorra ese 20% de investigación recurriendo a sus amplios conocimientos sobre el tema (aunque no haya comillas, que se note el sarcasmo).

Iván Núñez dijo...

Bueno, me temo que la mujer no tiene excusa, y aunque la tuviese no sé si te convencería, así que ya ni lo intento, entre otras cosas por que lo del agua es demasiado idiota.
Pero se da la casualidad de que lo de la tele (el rollo del embarazo en el cine y todo eso) sí que lo vi y en algunas cosas me temo que le daría la razón.

Los médicos no son mejores personas que cualquier otro profesional, y como casi todos los demás buscarán el modo de hacer su trabajo más fácil y con menos complicaciones. Yo que no soy médico ni entiendo del tema creo que el objetivo debería ser hacer las cosas más fáciles y con menos complicaciones para el paciente.

En inglaterra te dan 3 opciones para dar a luz, ir al hospital, más o menos como aquí, que el médico vaya a tu casa, o hacerlo en una piscinita. Aquí no se te ocurra pedir nada de eso. Una chica nos contó (más bien le contó a Luisa y yo estaba por allí) que la primera vez que dió a luz fue en españa (hará 12 años, así que la información puede estar obsoleta) y que la madre le iba contando las barrabasadas, como que no te da tiempo a ver al bebé en cuanto nace, se lo lleva una enfermera, y con suerte lo vuelves a ver al cabo de 6 o 7 horas, cuando lo que he leído por ahí es que lo ideal es que así como salen tomen su primera comida de leche materna, ganando con ello una cantidad de defensas nada desdeñable para un niño que se enfrenta al mundo por primera vez.

Después, débil y en su cuarto, recibió la visita de una enfermera que pasaba cada hora más o menos a aporrearle la barriga, para expulsar los trozos de placenta, por que si queda alguno dentro se puede hacer un cristo.
En Inglaterra, según nos contó, el niño nace, se lo llevan 2 minutos para pesarlo, medirlo y lavarlo, y después no se vuelve a separar de la madre. Nada de habitaciones llenas de bebés llorando, que no sabes ni cual es el tuyo, las habitaciones de las mamás tienen una cuna para los recién nacidos. Además nos dijo que le dieron un medicamento que hace que la placenta salga entera, nada de ir sacando trocitos y que una enfermera venga a meterte una paliza en la barriga.

Bueno, la verdad es que me acojonó y todo, y luego lo que dijo esa mujer en la televisión, pues como que tenía sentido.... es cierto que una mujer puede tener un desgarro, y que es mejor un corte limpio que un desgarro, pero que te practiquen un corte en las partes por que puede ser que en algún caso se cause desgarro.... pues que es una putada, siguiendo con el mismo razonamiento, dentro de poco todos los partos serán por cesárea, por si hay cualquier complicación, y la verdad, no me parece agradable.

Y bueno, ya sé que tiene que ver lo justo con el post, pero para hablar de las cosas en las que estamos de acuerdo, me ahorro teclear nada XD